jueves, 2 de julio de 2009

LAS PULGAS AL PODER

Al poco tiempo de estar en Ayelo de Malferit, en la casa donde nos quedábamos se originó una plaga de pulgas causada por los dos perros galgos que la dueña tenía en una cuadra. La plaga fue tan grande que todas las ropas, todas las colchonetas, y toda la casa se infectó por completo. Cuando por las noches nos acostábamos, las oiamos saltar por encima de las sábanas y colchonetas. Ssegún iban pasando los días, como íbamos a Yecla sólamente cada tres semanas, daba verguenza ver toda la ropa, sobre todo las sábanas, totalmente llena de cagadas de pulgas. A mi madre le daba bochorno llevar la ropa al huerto, a la vista de la gente. En más de una ocasión estos bichejos hacían viaje de ida y vuelta, porque, por mucho que te lavaras, siempre se escapaba alguno. Incluso estando en el cine de vez en cuando notabas un picotazo, y no era otra cosa que una pulga.
Aprovechando el momento voy a contar un chiste de pulgas. Al igual que dos personas cuando salen del cine y está lloviendo se preguntan ¿cogemos un taxi o nos vamos andando?, una vez salían dos pulgas del cine y estaba lloviendo y ellas se preguntaron ¿cogemos un perro o nos vamos brincando?.Aquella epidemia duró más de un mes. No había forma de extirparla, ni pegando fuego en la cuadra, ni echando zotal. Hasta que alguien se enteró de que vendían unos polvos muy eficaces para elimínarlas. Compramos los polvos, rociamos por todos los sitios. Pusimos a los perros totalmente blancos de polvo. A los cinco o seis días había desaparecido totalmente la epidemia.

No quiero dejar de contar lo siguiente: durante los once meses que estuve allí trabajando las comidas eran bastante flojas y escasas. Por las mañanas consistían en un bocadillo. Al mediodía, casi siempre arroz con patatas, algo de hierbas y algo de salado o unas morcillas asadas al fuego. Por la noche, siempre patatas fritas, algún trozo de tocino y fruta. Con mucha suerte, alguna onza de chocolate o un trozo de dulce de membrillo.

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LLegado a la jubilación, diviso mi vida como desde una atalaya: alegrías, miserias, trabajos, familia, amistades... Es como una película, la película de mi vida. Yo he tratado de presentar algunas cosillas en este sencillo blog. Es además, en cierta medida, el reflejo de lo que ha sido la vida de nuestra generación: carencias, sudor, lágrimas, y, también, algunos momentos agradables.

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