Así que, en el mes de Noviembre del año 1.974, empezamos a tomar las riendas de la nueva factoría. En esta al gual que en la de de Villena practicamente no había nada hecho, a excepción de lo poco que el Sr. Sánchez había realizado. El Sr. Colomina y su familia se instalaron en Murcia capital y yo me hospedé en el restaurante Los Naranjos, que estaba frente a la nueva factoría que íbamos a montar. Yo me marchaba a Villena los fines de semana y regresaba al trabajo los lunes. Quiérase o no, esto suponía una molestia para mí y también para mi familia, pero era la empresa la que mandaba y no había más remedio que obedecer. La única ventaja que iba a tener yo era la económica, por el aumento que me supuso sin haberlo pedido. Ocho meses estuve yo hospedado en el restaurante Los Naranjos, desde Noviembre hasta primeros del mes de Julio del año 1.975.
En principio, pensaba yo que, al acabar las obras de esta nueva factoría y dejarlo todo en condiciones, me trasladarían de nuevo a Villena; pero no fue así. Lo mismo pensó el Sr. Colomina. Pero, a medida que pasaba el tiempo, veíamos que nuestras ilusiones estaban cada vez más lejos. Tuvimos que hacernos a la idea de quedarnos aquí por tiempo indefinido.
No hay comentarios:
Publicar un comentario